Esta es una completa guía para poder escoger y preparar los troncos y el aislamiento más adecuados para tu acuario.
No compres troncos en la tienda, es mucho más divertido y barato recolectarlos en tus paseos por el campo.
No tengas el acuario sin troncos. Los troncos y cañas son unos de los elementos decorativos de mayor importancia en el acuario. A este aspecto se une la virtud de su escaso peso. Muchos peces, como los discos, los encuentran imprescindibles en su entorno; otros como los plecos, necesitan chupar celulosa de ellos.
Tipos de tronco más adecuados
El tipo más adecuado es, indiscutiblemente, la cepa de la vid. En general, conviene huir de las maderas blandas, esponjosas o resinosas. Cuanto más podrido esté un tronco, más útil nos será evitando siempre las maderas verdes. Lo ideal es emplear troncos que hayan sido recogidos en ríos, embalses o playas. Los ideales son los que proceden de las turberas.
- Maderas adecuadas: cepas de vid, raíces de sauce, madera sumergida durante largo tiempo.
- Maderas inadecuadas: madera verde, troncos de pino, abeto, maderas muy esponjosas, maderas aromáticas, maderas artificiales, conglomerados.
- Cañas adecuadas: bambú seco, cañas de rivera (plantas palustres).
- Cañas inadecuadas: cañas aplicadas en decoración (barnizadas, teñidas, etc.), cañas recién cortadas (verdes).
Respecto a las tonalidades que pueden encontrarse, todos los troncos poseen una tonalidad pardo-rojiza oscura. Las cañas tienen colores más claros. Troncos de tonalidades diferentes deben ser rechazados, pues seguramente incorporarán tintes.